24 de febrero de 2011

Querido diario:

Nuevamente aquí me encuentro, desolada, triste, cansada… Estoy harta de este juego que no lleva a ninguna parte, quiero tener una vida plena y estoy convencida de que nunca podre conseguirlo… Necesito que me amen, que me abracen y me digan una y otra vez que me quieren. Lo necesito para seguir viviendo, porque cada día que pasa me encuentro peor, porque me siento morir… No sé si lo que siento por Juan es real o simplemente producto de mi mente, no lo sé… Pero lo peor de todo es que esto es demasiado fuerte y me hace mucho daño. Me hace daño porque sé que nunca se hará realidad y mi vida seguirá siendo gris… Mañana será otro día más, el tiempo pasa y aquí estoy  triste y sola… Sin ti.

21 de febrero de 2011

Querido diario:

¿Dije que lo conseguiré? ¿Conseguiré olvidarle y seguir con mi nueva vida sin él? ¡MENTIRA!  Ese fue mi propósito, pero nuevamente he caído en la misma historia. Esto me va a costar mucho más de lo que yo imaginaba…Cuando por fin me decido a que todo cambie y a que las cosas sigan el curso natural de la vida ¡zas! Entonces vuelve a aparecer y a tocarme con sus manos y otra vez me derrumbo. ¡No sé cómo acabar con todo esto! ¡Y tengo que hacerlo! Porque el no tenerle me está matando…

Ya no puedo más, el no verle me está consumiendo y si le veo también me muero… ¿Qué puedo hacer con mi vida? ¿Cómo puedo continuar si lo que más necesito no lo tengo y está tan lejos de mí? ¿Por qué me ha tocado a mí tener que pasar por todo esto? Fue mi salvador en los malos momentos, supuso la única ilusión cuando daba todo por perdido, pero ahora se ha convertido en lo que más me duele. Nunca pude imaginar que algo que empezó como un simple juego se convirtiera en lo más importante de mi vida, no creí en ningún momento que esto me pudiera suceder, y por suerte o por desgracia me ha ocurrido. Sé que a partir de ahora debo esforzarme para apartarlo de mi corazón… 

1 de febrero

Querido diario:

Son ya catorce días sin él… Sé que he elegido esta situación y quizás tenga lo que yo sola me he buscado, pero sé que seguir con esto arruinaría la vida de todas las personas que ambos amamos… No hago más que pensar en cómo llegó a mi vida y me pregunto constantemente por qué me tuve que enamorar de Juan de esta manera… Por más que quiera remediarlo siempre vivirá en mi corazón, pero esta vez lo hará en silencio. ¡Me duele tanto no tenerle…! Cuando miro por la ventana de mi habitación y miro al cielo siempre me pregunto si él sentirá lo mismo por mí o quizás ya me ha olvidado…

31 de enero

Querido diario:

Hoy es mi treceavo día sin él… El dolor tan grande que sentía estos días de atrás se ha sosegado, no he dejado ni un solo minuto de pensar en Juan pero me voy haciendo a la idea de que todo esto tiene que terminar por el bien de nuestras familias. Alguien tiene que sacrificar su vida por el bien de los demás y como siempre esa misión me toca a mí. Es tremendamente triste haber tocado la felicidad con la yema de los dedos y no poder agarrarse a ella para no perderla, pero así es la vida… No debo ser yo la persona que lleve el dolor a tanta gente por el puro egoísmo de querer ser feliz. A mí me tocó perder y tengo que conformarme. Solo espero poder llevarlo de la mejor manera posible y que algún día, si Dios quiere, la vida me sonrria…

28 de enero

Querido diario:

Aquí estoy delante de ti, intentando reflejar todo lo que pasa por mi mente. Hoy no ha sido un día fácil, he recordado muchas cosas del pasado que aún hoy me duelen tremendamente, mi vida ha sido muy dura, exageradamente dura, y me la he tragado yo sola… Todo ha vuelto a mi memoria al sentirme culpable por sentir lo que no debería por Juan. No puedo más, yo no quiero sentir esto y sin embargo lo siento… Le quiero y no puedo evitarlo, y estoy plenamente convencida que es algo que nunca podré alcanzar… Este querer y no poder me está matando… 

23 de enero

Querido diario:

Aquí estoy una vez más, viendo la vida pasar… Hoy es el quinto día de mi supuesta nueva vida, de esta vida vacía y triste. En estos momentos no me encuentro bien, me siento totalmente derrotada, he cerrado el mejor capítulo que había escrito en mi existencia para comenzar otro en el que nadie sufrirá excepto yo y, quién sabe, si también lo hará él… Sé que las cosas deben ser así, eso es lo que mi cabeza me dice, pero mi corazón me reclama lo contrario. Debo ser yo, como siempre, quien se sacrifique  para que otros continúen  su camino…  ¡La vida no es justa…! No, no lo es… No dejo de pensar en el porqué de todo esto ¿Por qué tuve que descubrirle tarde? ¿Por qué no le conocí cuando las cosas podían ser posibles? ¿Por qué ha aparecido en mi vida cuando ya no podemos hacer nada? ¿Qué he hecho yo para tener que sufrir tanto?

El único consuelo que me queda es que los momentos vividos permanecerán dentro de mí y nadie podrá arrebatármelos… ¡En fin! Mañana será otro día, mi sexto día sin él.

22 de enero

Querido diario:

Hoy es mi cuarto día sin él… ¡Dios mío, como le echo de menos! Nunca imaginé que se convertiría en el motor de mi vida. ¿Qué voy a hacer a partir de ahora sin Juan? No quiero una vida sin él. Extraño tanto su sonrisa, su mirada, su olor… ¡Le extraño tanto! ¿Podré seguir con mi vida en su ausencia…? ¿Podré borrar algún día de mí este sentimiento? 

16 de enero

Querido diario:

¿Qué pasará hoy? Pienso ignorarlo totalmente, tengo que hacerlo para que todo esto termine. Aunque sé que si lo hago estaré arrepintiéndome el resto de mi vida… Sé que le amo profundamente y que si rompo con él no tendré ningunas ganas de vivir… 

15 de Enero

Querido diario:

Hoy ha venido a verme y la verdad es que me he quedado un poco triste cuando se ha marchado. Durante estos últimos días he descubierto que estoy realmente enamorada de él. Esto no debió pasar en ningún momento, pero por suerte o por desgracia ha ocurrido. Yo no he buscado nada, surgió porque  sí, siempre he creído que él también siente algo parecido por mí, pero ahora no sé qué pensar…  Sin él mi vida no tiene sentido…

12 de Enero de 2011

Querido diario:

Hoy estoy aquí sentada, esperando volver a verlo… Hace unos cuantos días que no ha venido y ya no puedo más… Pensaba que la distancia borraría su recuerdo pero no ha sido así, cuando más tiempo estoy alejada de él, más me demuestra la vida lo que siento.  

El es Juan, un amigo, le conozco hace tanto tiempo que no sabría decir… Pero ha sido de un año a esta parte cuando he descubierto que no es una simple amistad lo que siento por él. Es algo que no he buscado y a pesar de todo ha nacido en mi corazón.

No sé por qué me ha tenido que ocurrir esto a mí, jamás podría imaginar que sería capaz de sentir tanto amor por otra persona, tanto que en algunas ocasiones lo dejaría todo para comenzar una nueva vida junto a él…

Querido diario:

Hoy  es el día en que, con tus tapas suaves de piel y ese olor a nuevo al  ojear tus hojas, has llegado a mis manos. Has sido el regalo que mi hermano me ha dejado caer en estos días de navidad. Creo que tú y yo vamos a ser muy buenos compañeros en este camino que es la vida, mi vida…  Desde ahora te haré partícipe de todas esas cosas que guardo en mi corazón, aquellos  sentimientos que yo sola conozco y que por ciertas razones que ya conocerás nadie más debe saber...