sábado, 23 de noviembre de 2013

Querida amiga:


Hoy he decidido escribirte, a pesar de haber decidido ignorar
todas las indirectas que lanzas a través de tu móvil.
Ambas seguimos leyéndonos, yo no sé ni por qué lo hago, la verdad...
Tu, supongo, porque te aburres y porque quieres hacer todo el daño posible.
Yo...porque me hace reír tu absurdo comportamiento...
Percibo como te sientes, noto tu ira y tu rabia y los deseos de venganza que tienes.
No se si entenderlo o no, porque ya sabes lo que pienso al respecto..
Deberías centrarte en lo que tienes al lado y disfrutar, si es verdad que eres tan feliz con tu trofeo...
Quiero que sepas que yo también podría hacer mucho daño.
Se muchas cosas, muchas.
Pero soy como soy, y no las diré.
No va conmigo esos rollos de odio y venganza.
Todo lo contrario.
Tan solo deseo que seas feliz, tanto como lo soy yo.
Para tu información te diré que he encontrado al amor de mi vida.
Parece mentira, si, pero así ha sido.
Es lo que tiene no conformarse con cualquier cosa y seguir el camino.
Duro a veces, si, pero camino...
La vida suele compensar y a mi me ha compensado.
Jamás pensé que encontraría a una persona como el.
Sabes que he sufrido mucho, pero al fin puedo decir que soy realmente feliz.
Por mi, puedes seguir escribiendo idioteces, porque haciéndolo no me haces daño, te lo haces a ti misma...
Me resbalan, todas y cada una de ellas me han resbalado. Porque hace mucho tiempo que me bajé de ese tren, y comencé a realizar mi verdadero viaje.
Y ese recorrido está muy lejos del tuyo...
Así que disfruta, vive, ríe y mantén al hombre de tu vida a tu lado.
No le dejes escapar, pero no de la forma que lo has hecho hasta ahora, si no con amor, ese es el único camino...

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