Hoy, cuando el nuevo año no ha hecho más que comenzar, quiero agradecerte tantas cosas…
¡Gracias por abrazarme cuando más lo necesito…! No imaginas lo bien que me siento entre tus brazos…
¡Gracias por escucharme…! Siempre tengo tantas cosas que decirte, buenas y malas, y ahí estás tú, escuchando con paciencia todo aquello que brota de mis labios…
¡Gracias por contarme todas tus cosas…! Me haces sentir especial cuando compartes conmigo tus alegrías, tus dudas, tus temores…
¡Gracias por besarme…! Muero por besar tus labios…
¡Gracias por acariciarme con ternura…! Nunca nadie me había acariciado de ese modo, cada vez que lo haces me elevas a lo más alto del cielo…
¡Gracias por decirme ``te quiero´´…! Sé lo mucho que te cuesta expresar tus sentimientos y tú sabes lo que yo necesito escuchar de tus labios esa palabra…
Y sobre todo…
¡Gracias por hacerme tan feliz…!
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