Nunca podrás comprender lo desolada y triste que estoy... Ahora que estamos separados he descubierto todo lo que realmente siento... Yo sabía que te amaba, pero nunca imaginé hasta qué punto. ¡Mi vida no tiene ningún sentido si tú no estás en ella, ninguno!
Solo deseo dormir y cuanto más mejor, porque no quiero saber nada de la realidad que en estos momentos me abruma… No tengo fuerzas para levantarme de la cama, porque sin tenerte cerca no merece la pena seguir viviendo… ¡Te necesito tanto que me cuesta respirar…!
Sé que debo acostumbrarme a no tenerte y ahora más que te has apartado de mi vida. ¡No sabes lo que yo daría por tenerte nuevamente a mi lado…!
Me lo has dado todo, absolutamente todo lo que yo necesitaba para seguir viviendo. Has sido el mejor regalo que Dios me ha hecho, no hay nada comparable a ti…
No sabes lo que me cuesta renunciar a este amor… ¡No quiero hacerlo por nada! ¡Te quiero tanto que no sé si seré capaz de seguir adelante sin ti…!
¡Quiero seguir siendo tu princesa! ¡Quiero hacerte feliz! ¡Por nada en el mundo quiero apartarme de tu lado…!
¡Hoy tengo más claro que nunca que te quiero solo a ti…!
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